Fue puras ganas, pero pocas ideas. Por eso igualó 0 a 0 y quedó eliminado.
Kalujerovich equivocó los caminos y los lamentos fueron terribles. Igualó 0 a 0 ayer con Atlético Concepción de Tucumán y fue eliminado del Torneo del Interior, al no revertir el 0-1 que sufrió hace 7 días en La Banda del río Salí.
Se cayó un candidato, decían propios y extraños en el “Tito” Molinari, pero indudablemente que a la pobre labor del equipo de Adrián Kalujerovich hay que sumarle el mérito a la defensa del equipo tucumano y a jugar con la desesperación del rival.
La “fusión” parecía que desde el inicio se lo iba a comer a Atlético Concepción, pero como siempre ocurre en estos casos, cuando un equipo debe remontar una mínima diferencia, no supo trabajar el balón con inteligencia para poder llegar con mayor claridad.
Una sola
Solamente tuvo una jugada clarísima de riesgo que fue cuando Yamil Assefh remató dentro del área y la pelota se disponía a trasponer la línea de sentencia, y en ese momento un defensor ahogó el grito de gol al sacarla de su destino.
Después fueron sólo intenciones y más intenciones. Nada de fútbol. En el complemento, Kalujerovich intentó recomponer las líneas con los ingresos de Juan Paz, Aranda y Rodrigo Díaz, pero ninguno fue la solución, inclusive cayeron en la misma desesperación que el resto de sus compañeros.
Atlético Concepción aceptó lo que propuso la “fusión” y se paró bien en la defensa, donde el santiagueño Diego Díaz sobresalió con un nivel parejo.
Después fueron sólo intenciones y más intenciones. Nada de fútbol. En el complemento, Kalujerovich intentó recomponer las líneas con los ingresos de Juan Paz, Aranda y Rodrigo Díaz, pero ninguno fue la solución, inclusive cayeron en la misma desesperación que el resto de sus compañeros.
Atlético Concepción aceptó lo que propuso la “fusión” y se paró bien en la defensa, donde el santiagueño Diego Díaz sobresalió con un nivel parejo.
A matar o morir
En los últimos 15 minutos, la “fusión” tomó la posta y se “instaló” definitivamente en el campo contrario. Sebastián Sánchez se jugaba entero en cada pelota, los mediocampistas retrucaban con guapeza y temperamento, pero se olvidaron de jugar al balón, de jugar por afuera e intentar sacar provecho de alguna que otra pelota parada. Nada de eso ocurrió porque llegó el final, con lágrimas y desconsuelo en la gente de Unión Santiago y los “leones” festejando con su hinchada. Una tarde que muchos querrán olvidar.
Esto es fútbol. Unión Santiago tendrá que pararse rápidamente porque se entiende que los grandes saben hacerlo hasta en lo momentos difíciles
En los últimos 15 minutos, la “fusión” tomó la posta y se “instaló” definitivamente en el campo contrario. Sebastián Sánchez se jugaba entero en cada pelota, los mediocampistas retrucaban con guapeza y temperamento, pero se olvidaron de jugar al balón, de jugar por afuera e intentar sacar provecho de alguna que otra pelota parada. Nada de eso ocurrió porque llegó el final, con lágrimas y desconsuelo en la gente de Unión Santiago y los “leones” festejando con su hinchada. Una tarde que muchos querrán olvidar.
Esto es fútbol. Unión Santiago tendrá que pararse rápidamente porque se entiende que los grandes saben hacerlo hasta en lo momentos difíciles
Fuente: www.nuevodiarioweb.com.ar
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